
"No me importa tener que ir a cualquier lugar a formarme o en busca de oportunidades para lograrlo"
Andrea Izquierdo
Autodidacto y empeñado por ver el nombre de su banda, Ares, algún día liderando alguno de los carteles de los festivales pop/rock más importantes del mundo, Sergio Zafra es un joven de 19 años amante de la música. Después de tocar por los bares de media Cataluña ha descubierto que no ama nada más que esto en la vida.
“Me llamaron mediocre en la escuela, pero era un mediocre con guitarra, eso lo cambiaba todo”. Sergio Zafra, con 13 años tenía las cosas más claras que algunos en su edad adulta. Él no aspiraba a ser un mediocre en la vida, y si lo terminaba siendo, que fuera entre acordes y bambalinas."
Sergio logra hacer una metamorfosis con sus sentimientos que no está a nivel de cualquiera. La voz principal y guitarrista de Ares, es capaz de hacer nacer una mariposa en forma de canción a partir de cualquiera de sus dramas emocionales. “La culpa de todo esto la tienen mis lamentaciones, soy demasiado sentimental. Puedo llevar semanas tratando de componer una canción y no lograr un buen resultado, sin embargo, un bajón emocional causa que componga en dos horas lo que no he sido capaz de componer en tres semanas. Mis compañeros de grupo incluso desean constantemente que me busque parejas y estas me dejen para que me venga la inspiración”. Sergio tiene claro que no todo lo malo es tan negativo como parece, todo es diferente al son del compás. “La música me ha hecho ganar confianza en mí mismo, toda la vida he creído ser un mediocre por culpa de los estudios. En la escuela me sentía un incomprendido, igual que me sentí una víctima del sistema educativo en los niveles superiores. Sin embargo, la música me ha hecho borrar esa imagen que tenía de mi mismo, no soy tan malo en la vida”. Sergio parece reencarnar el papel de Billy Elliot en el musical de su propia vida. El chico ignorado que lucha por un sueño y termina deslumbrando a todo aquel que le tacha de incompetente.

Sergio Zafra durante la entrevista. || Andrea Izquierdo
Sergio busca que cada persona de su banda se sienta único, que nadie sea imprescindible. “La unión es la clave para que el protagonismo no termine convirtiendo la existencia de la banda en una tragicomedia”. Está claro que no quieren sufrir una separación causada por luchas de egos como han podido sufrir otras bandas como One Direction o los BackStreet Boys a nivel internacional. “No es una batalla de egos, es un grupo y nadie es más que nadie. Eso lo tengo claro. Estamos donde estamos por nuestro fuerte vínculo. Ellos son mis amigos, así empezamos y así terminaremos”.
Su agradecimiento parece ser parte de una historia interminable. No le faltan palabras para nadie. “Debo dar gracias a todas aquellas personas que han confiado en nosotros, ya sea en algún bolo en solitario o como banda. Todo esto no estaría ocurriendo sin la colaboración de todos los bares de Barcelona, Manresa y alrededores”. Agradecido y orgulloso alaba la labor de aquellos locos de la música que creen en los jóvenes y no les cierran puertas. “Ellos en cierto modo han logrado que pase los mejores momentos de mi vida sobre un escenario. Gracias a su esfuerzo, hace unas semanas estuvimos a punto de quedar semifinalistas en uno de los concursos más importantes de mi ciudad, Manresa. Este estaba organizado por el bar Voilà y el premio era grabar un disco sin pagar nada”.
“La música me ha hecho borrar esa imagen que tenía de mí mismo, no soy tan malo en la vida”

Sergio Zafra interpretando su último sencillo Cierro Los Ojos. || Andrea Izquierdo
Sergio Zafra durante la entrevista. || Andrea Izquierdo
Como en toda carrera musical, no todo es éxito, este hay que forjarlo. En este caso el tópico no desvaría. “Mi madre es muy tradicional y no siempre ha confiado en que la música me pueda dar un trabajo, pero nada pudo pararme y al final la acabé convenciendo de que esto era lo mío”. Si su vida fuera una lista de reproducción, la primera canción en sonar sería The Show Must Go On, el de Queen, canción que ha sido su filosofía de vida. Y en su particular lista, la siguiente canción en sonar es Don’t Stop Me Now del mismo artista.
Sergio se derrite entre sus palabras alabando a su banda, cuyo pilar fundamental es la amistad. Los cinco integrantes de Ares están grabando su primer disco, lo que le hace tener estos sentimientos a flor de piel. “Estoy muy orgulloso de lo que estamos haciendo. Lo hemos logrado con amistad. Nunca nos falta complicidad sobre el escenario, cederle el solo a alguien es algo que se ha convertido en un ritual. Queremos que cada uno de nosotros se sienta orgulloso”.
“Quiero vivir de esto el día de mañana. Soy consciente de que soy joven, pero sigo formándome. Es cierto que he sido toda la vida autodidacto, pero ahora he empezado a tomar clases particulares de canto. No quiero que esto termine. Voy a luchar para que esto no termine. Sobre un escenario soy feliz y eso no lo cambiará nada en el mundo, y no me importa tener que ir a cualquier lugar a formarme o en busca de oportunidades para lograrlo”. Sergio no quiere que se apaguen los focos, no quiere que termine el concierto que es su vida, él quiere que le sigan las luces y que estas le guíen a casa. Y Sergio no concibe su casa como otro lugar que no sea un escenario. “Quiero seguir pensando toda mi vida en notas musicales y no voy a aceptar un no por respuesta”. Su nuevo single, Cierro los ojos, será un nuevo intento por parte de Sergio y su banda por llegar a lo más alto.
